El post de hoy es novedad... es el primer DIY que os enseño, y espero que no sea el último, porque tengo muchas ideas en la cabeza listas para ser llevadas a cabo.
Julio ha sido un mes de música, música en formato físico. Me he animado a grabar un par de CD's recopilatorios para poder disfrutar mi cadena de música, que desde la "era de los smartphones" está un pelín tristona, además me da más seguridad sentir que las canciones están en un soporte físico y no en el aire, no se por qué.
Hacer una caja de CD diferente y única es muy muy fácil, seguro que todos alguna vez habéis puesto tapas o fotos en la caja de un CD que habéis grabado, y se trata básicamente de eso, aunque dando un pequeño toque a los bordes de la caja con washi tape.
Los materiales esenciales son una caja de CD, papel (o fotografías), un lápiz, washi tape y unas tijeras o un cúter. Lo mejor es que la caja sea completamente transparente y no tenga el lateral de color negro (para que se pegue mejor el washi y no se doblen las esquinas).
Para empezar, he marcado en el papel la silueta de la caja y luego la he recortado un poco más pequeña, para que encaje bien. Si no os fiáis de hacerlo a ojo, recortad la silueta tal cual y luego ya iréis haciendo poco a poco que encaje, ¡pero mejor que sobre que que falte!
IMPORTANTE: El trozo de papel que va en la parte de atrás tiene que ser un poco más ancho que el de delante.
Cuando el papel está completamente recortado con la medida de la caja... ¡a dibujar! Yo, he hecho un gatete con maleta (dibujando gatos... ¿qué raro, no?), ya que los discos se suelen poner en el coche cuando se viaja :P
Para poder pegar bien el washi en los laterales de la caja hace falta desmontarla. Mucho cuidadín no os la vayáis a cargar, que no sería la primera vez que pasa (por experiencia).
Antes de volverla a montar hay que colocar la ilustración trasera y, si vuestra caja es transparente, otro papel (liso o ilustrado) del mismo tamaño justo detrás de donde va a ir el disco. Yo he puesto una cartulina azul (la rosa al final no la he utilizado para nada).
Y... tachán. El resultado es una caja diferente y única, mucho más bonita que siendo transparente y sosa. No hace falta ser un manitas para guardar los discos en cajas decoradas, ni siquiera saber dibujar, basta con coger una fotografía o recortes de revistas y ponerse a recortar (:
¿Qué os a parecido?
¡Que tengáis un buen día!
El post de hoy es novedad... es el primer DIY que os enseño , y espero que no sea el último, porque tengo muchas ideas en la cabeza listas...
